El contenido es el rey del marketing digital

En el marketing digital el contenido lleva la corona

Descubre cómo usar el contenido para acercarte a tus clientes potenciales

Con el contenido podrás posicionarte y ganar autoridad, generando confianza entre tu público objetivo y aumenta las probabilidades de ventas

El marketing digital reposa sobre la base de una serie de elementos indispensable para el éxito con tu negocio online y una de esas bases es el contenido.

Por contenido no solamente nos referimos a contenido escrito, sino también a los videos, imágenes, infografías, GIFs, y toda clase de elementos ideales para transmitir sensaciones y mensajes a tus clientes.

          El contenido es un puente entre tu negocio y tus clientes potenciales

El contenido es por lo tanto un recurso que te facilita el acercamiento a tus clientes potenciales para poder presentarles tu marca.

Sin embargo, para que el contenido te dé resultado en términos de ventas tienes que ir llevando a tus clientes potenciales a través de lecturas que le den la seguridad de que se encuentran ante un experto, alguien que los entiende y que tiene la capacidad de ayudarles a resolver sus problemas.

Lo anterior puede lograrse si aplicas efectivamente las estrategias de persuasión y atracción mediante el uso del contenido. Es decir, si publicas contenido que de forma directa ofrezca tu oferta estarás reduciendo tus probabilidades de ventas, pues los clientes potenciales quieren primeramente sentirse a gusto para así tomar la decisión y comprar.

          Las fases del contenido para tu marketing digital

La pregunta es, cómo generar contenido que pueda causar un efecto positivo entre tu público objetivo.

Puedes generar contenido por fase. Bien sea para tu blog, web, redes sociales e incluso cuando se trata de contenido para el email marketing tienes que trabajar en base a secuencias que vayan por fase.

La primera es la fase podemos llamarla la fase de enamoramiento. Debes mostrarles a tus clientes potenciales que los puedes entender, que comprendes la situación en la que se encuentran y que tú también has estado allí. Esto generará empatía, atracción, y tus clientes potenciales estarán dispuestos a seguir leyendo.

La segunda fase es la de la autoridad. Ahora que tienes la atención de tus clientes potenciales, debes mostrarte como una autoridad en los temas de interés para ellos. Por eso, antes de idear tu contenido tienes que haber definido a tu cliente ideal, de esa manera sabrás cuáles son los temas de interés y el tono con el que te dirigirás hacia ellos.

La tercera fase es la de la presentación de la oferta. Después que te has mostrado como un experto en los temas de interés, tus clientes potenciales estarán más dispuestos a escuchar sobre lo que haces y ofreces. La idea de esta fase es hacerla progresivamente. Es decir, no vas a hablarle de la oferta primeramente sino que puedes seguir este patrón: les hablas de los beneficios, les habas del dolor que seguirán sintiendo sin determinada solución, les hablas de cómo otros han cambiado sus vidas al solucionar sus problemas, les presentas la oferta.

Es importante que evite las ambigüedades y ofrecer información que realmente les pueda ayudar, que sea práctica y simple.